La Paz, Bolivia — Bajo el estruendo de clamores revolucionarios, la Federación Única de Trabajadores Campesinos Tupac Katari ha declarado el fin de la paciencia con un gobierno que tildan de corrupto y traidor. Desde el alba del lunes 16 de septiembre, se iniciará un bloqueo nacional de caminos sin precedentes, prometiendo paralizar el corazón de Bolivia hasta que caigan las figuras despóticas del presidente Luis Arce y el vicepresidente David Choquehuanca.
«¡Basta ya de traiciones y de políticas que estrangulan a nuestro pueblo!», exclamó David Mamani, líder incansable de la Federación, frente a una multitud enardecida. El movimiento acusa al gobierno de sumir al país en la miseria y de ignorar las voces de sus propios ciudadanos, con políticas que solo han servido para llenar los bolsillos de unos pocos mientras la nación se desangra.
El anuncio viene acompañado de un desprecio total hacia Juan Carlos Huarachi, repudiado por su alianza con los que ahora llaman «los verdugos del pueblo». La Federación Tupac Katari, armada con el fervor de miles de campesinos, obreros y estudiantes, ha jurado mantenerse firme en las carreteras, en las plazas y en todos los frentes necesarios. «Este lunes las calles se vestirán de dignidad. La resistencia no es solo un derecho; es un deber sagrado cuando la patria está en peligro», afirmó Mamani.
La Federación promete que esta será una batalla épica, un despertar de conciencias y un renacimiento del espíritu combativo que no se apagará hasta ver renunciar a los «usurpadores del poder». Con la esperanza de un nuevo amanecer sin tiranía, Tupac Katari llama a todos los sectores de la sociedad a unirse en este momento crucial.
«Que este sea el rugido que escuchen todos los tiranos: ¡Se acabó la paciencia, y el pueblo no dará ni un paso atrás!», concluyó el líder, mientras las banderas ondeaban al viento, presagiando la tormenta que se avecina.
Este levantamiento marca un momento decisivo en la historia de Bolivia. La Base 4.0 estará cubriendo cada momento de este histórico enfrentamiento, manteniendo al mundo al tanto del pulso de una nación que clama por justicia y libertad.